A vueltas con los microinversores

Son muchos los clientes que nos preguntan sobre si es mejor para su instalación fotovoltaica montar microinversores, como ven en algunas ofertas, o montar inversores unitarios y, en éste último caso, si vale la pena poner optimizadores. En este artículo vamos a intentar disipar dudas para que cada cual tome la decisión más ventajosa.

Aunque no es la primera vez que hablamos de inversores en este blog, antes de meternos en faena, aclaremos los conceptos que estaremos manejando en este artículo:

Un inversor de cadena es un inversor diseñado para conectar cadenas de módulos fotovoltaicos conectados en serie. Los inversores de cadena pueden tener varias entradas. La corriente continua recibida de los módulos se transforma en corriente alterna para consumir en la vivienda o verterla en la red.

Un microinversor es un inversor montado directamente en el módulo fotovoltaico, y allí transforma la corriente continua en corriente alterna. Por tanto, el cableado desde el módulo al cuadro es un cableado de alterna, al contrario que el cableado del módulo a un inversor de cadena, que es un cableado de corriente continua.

Los optimizadores garantizan que si un solo panel produce menos de lo necesario, debido a la sombra o a un mal funcionamiento, el resto de la cadena no se verá afectado. Para hacer esto necesitan al inversor de cadena. Aunque esto también sucede con los microinversores.

¿Cuáles son las ventajas e inconvenientes de cada uno?

La principal ventaja del inversor de cadena es la rentabilidad. Si la instalación está orientada en la misma dirección y no tiene sombras es la mejor opción. En estos casos es muy importante la monitorización, pues si uno de los paneles de la serie falla, fallará toda la serie.

En cambio, con los microinversores cada combinación de panel y microinversor funciona como un sistema eléctrico solar autónomo. Las instalaciones fotovoltaicas con microinversores pueden ser tan pequeños o tan grandes como se necesite, y los paneles pueden adaptarse a cualquier orientación o inclinación, ya que cada uno es independiente del resto. Igualmente, es posible comenzar con una instalación pequeña más ajustada en presupuesto, y ampliarla más adelante.

Utilizar un microinversor frente a los inversores de cadena es más cómodo, pero los microinversores son algo más caros en términos de coste por vatio, aunque, en general, son más eficientes y robustos. También vamos a tener más cableado de alterna, más caro y que nos puede dar más problemas, pues hay que cablear cada módulo a nuestro cuadro eléctrico.

Los problemas de sombras o problemas técnicos con los inversores en cadena se pueden solucionar instalando optimizadores en los módulos fotovoltaicos. En este caso, la combinación del inversor en cadena con optimizadores casi iguala en coste al microinversor.

Y hasta aquí nuestro resumen simplificado. Si aún no tienes claro cuál sería la opción favorable para ti, ponte en contacto con nosotros para hacer un estudio personalizado de tu caso.

Te esperamos un nuestra siguiente entrada, donde analizaremos las instalaciones con baterías y su comparación con la compensación de excedente y batería virtual.